miércoles, 9 de marzo de 2011

Muchas personas quieren perder peso pero no pueden soportar las rutinas de ejercicios intensas ni tampoco son lo demasiado constantes como para llevar una dieta. Si eres una de esas personas, no dudes en seguir los siguientes consejos que te permitirán adelgazar sin tener que pasar por demasiados esfuerzos. Se trata básicamente de dietas que permiten comer una cantidad menor de calorías sin la necesidad de tener que dejar de sentirse satisfecho.

En primer lugar, es fundamental tener en cuenta que muchas veces cuando se intenta bajar de peso se reduce la cantidad de alimentos. Sin embargo, esto puede provocar que una persona que no está acostumbrada a comer poco pueda acumular mucha hambre y arruinar la dieta por completo. Si verdaderamente quieres bajar de peso a largo plazo, no dudes en que la  manera de hacerlo es cambiando la alimentación pero no drásticamente, sino de una forma que no sea intolerable ni que requiera demasiado esfuerzo.
La clave está en saber qué alimentos seleccionar, ya que algunas comidas cuentan con más calorías que otras. La idea está en reducir las calorías y no la cantidad de alimentos para poder reducir de peso sin grandes sacrificios.

SUERTE

martes, 1 de marzo de 2011

Cambiar la dieta sin esfuerzo

Estos cambios en tu dieta requieren un poco de sacrificio y te harán perder esos kilos demás. Sigue estos consejos y empezarás a ver los resultados en una semana.

Desayuno
1. Bebe leche desnatada.
2. Usa platos y vasos pequeños.
3. Usa sartén de teflón y poco aceite para tus frituras.
4. Prepara torillas y pónle verduras en lugar de jamón y queso.
5. Haz tus sándwiches con pan integral light.

Almuerzo/Cena
1. Usa mayonesa baja en grasas.
2. Si comes pasta, agrégale pimientos, champiñones o cebollas en lugar de carne.
3. Escoge atún envasado con agua en lugar del que viene con aceite.
4. Remueve la capa de grasa superficial en sopas, guisos y salsas antes de servir.
5. Prefiere aceite de oliva y vinagre o limón en lugar de aderezos cremosos para tu ensalada.
6. Quítale el pellejo al pollo.
7. Que tus porciones de carne de vaca no sean mayores al tamaño de un mazo de cartas.
8. Reduce media taza de tus porciones de pasta o arroz.
9. Come despacio y haz durar tu comida para evitar las repeticiones.
10. Deja 3 o 4 bocados en el plato.

Postre
1. Si te provoca comer una bola de helado, sírvete la mitad y completa el resto con fresas.
2. Al comer una torta, elige una porción del centro: tiene la mitad del glaseado o baño de fudge.
3. Prefiere un pie de fruta, como la manzana, a uno como el de nueces.
4. Trata de satisfacer tu antojo de mega calorías comiendo solo un trozo pequeño del postre en lugar de una porción completa.
5. Comparte siempre.

Bebidas
1. Cambia tu gaseosa habitual por agua gasificada con zumo de limón o naranja.
2. Presta atención al tamaño de las botellas o latas “personales”: algunas traen dos o más porciones.
3. Bebe cerveza light y limítate a una o dos botellas individuales.
4. Elige jugos de fruta 100% naturales.
5. Prefiere cerveza o vino a los cocteles tipo frozen preparados con frutas.

Snacks
1. Congela uvas o pedazos de sandía y tendrás algo similar a un helado de hielo.
2. Controla tus porciones sirviéndolas en un plato en lugar de comer directamente de la bolsa.
3. Cambia los chips por vegetales crudos –apio, barritas de zanahoria, palitos de pepino- y cómelos con dips bajos en grasas.
4. Prefiere las papas horneadas a las fritas.
5. Si quieres chocolate busca algun snack sustitutivo bajo en calorías.
Información obtenida de la publicación "Prevention".

lunes, 28 de febrero de 2011

En busca del peso ideal

Mantenerte delgado es posible y no requiere de grandes sacrificios sino de cambios de hábitos y constancia para mantenerlos. Realizar dietas nos pone de mal humor y aunque adelgacemos algunos kilos, luego los recuperaremos si no cambiamos nuestras constumbres diarias. Si logramos incorporar en nuestra vida diaria algunos preceptos de la vida sana, no necesitaremos estar nunca más a dieta ni preocuparnos cuando nos miremos al espejo, sin contar que además estaremos fortaleciendo nuestra salud. Es imposible que cambiemos drásticamente nuestro estilo de vida, pero sí es posible hacerlo de forma paulatina. Haz los cambios pasito a pasito.
La vida activa te brindará salud y te permitirá no engordar. Camina al menos 40 minutos por día, si puede ser después de comer mejor. Haz un circuito y ponte horarios fijos para esta actividad, disminuye el consumo de grasas, que además de hacernos engordar son un riesgo para el sistema vascular. El consejo es que no tengas en tu casa productos de bollería, galletas industriales ni chuches de ninguna clase, por que son la mayor tentación cuando estamos aburridos. Reduce o evita la sal. Si bien la sal no tiene calorías, nos hace retener líquidos y vernos mal. No es fácil pero si lo haces paulatinamente reducirás el consumo de sal sin darte cuenta.

¡SUERTE!